viernes, 28 de junio de 2013

EL TRABAJO COOPERATIVO



       Revisando antiguos documentos he rescatado éste sobre el Trabajo cooperativo que en su día encontré muy interesante. Estas prácticas educativas no se han extendido más allá de la asignatura de educación física, en la mayor parte de los centros educativos.

   Actualmente hay pocos centros que basen sus didácticas en el trabajo cooperativo. Entre ellos se encuentra el Colegio Julio Verne. En este enlace descubrirán las ventajas de seguir unas estructuras o reglas en el trabajo cooperativo. Colegio Julio Verne.
EL TRABAJO COOPERATIVO
  • Autor: Pedro J. Rubio Hernández (Asesor de E.F. en el C.P.R. de Teruel).
  • Documento elaborado para introducir las actividades cooperativas a través de las danzas en la clase de Educación Física, tema del seminario “BAILE PARA TODO EL MUNDO II: Del trabajo en grupo al trabajo cooperativo”, realizado en el C.P.R. de Teruel durante el curso 2003-2004, del que el autor fue coordinador.
1.-DEFINICIÓN:
Según la Real Academia de la Lengua, cooperar es obrar conjuntamente con uno u otros para un mismo fin.
Carlos Velázquez: Aprendizaje cooperativo es una metodología educativa que se basa en el trabajo en pequeños grupos, generalmente heterogéneos, en los que el alumnado trabaja junto para mejorar su propio aprendizaje y el de los demás.

2.-JUSTIFICACIÓN:

2.1.-INTERACCIÓN EN CONTEXTOS EDUCATIVOS:
Interacción es un proceso de relación interpersonal en el que los individuos o grupos se influyen recíprocamente.
Tradicionalmente se ha pensado que las relaciones que establece el alumnado dentro del aula, perjudica el rendimiento escolar, por lo que son indeseables y se considera que la interacción profesorado-alumnado. es la única fundamental para alcanzar los objetivos educativos.
Sin embargo se ha demostrado la enorme influencia que tiene la interacción entre alumnos y alumnas en cuanto que:
·        Contribuye y facilita el aprendizaje de destrezas sociales al margen de los adultos.
·        Ofrece un contexto que permite comparar los logros propios con los de los demás.
·        Fomenta el sentido de pertenencia al grupo.
Lo que facilita el aprendizaje no es la cantidad sino la naturaleza de esta interacción en la que influyen tres variables:
1.      El esfuerzo de los diferentes miembros del grupo.
2.      Los conocimientos y habilidades de cada componente del equipo.
3.      La estrategia colectiva.
Existen tres formas básicas de estructurar las actividades según la interacción entre el alumnado:
  • Competitivas: “Tu éxito me perjudica, tu fracaso me beneficia”.
  • Individualistas: “Tu éxito no me importa, sólo me preocupa el mío”.
  • Cooperativas: “Tu éxito me beneficia, tu fracaso me perjudica”.

2.2.-APRENDIZAJE COOPERATIVO: Investigaciones y experiencias.
La metodología cooperativa es todavía una metodología innovadora de hecho, en E.F. no se ha investigado de un modo sistemático hasta la década de los noventa y primeros años del siglo XXI.
De los numerosos investigadores e investigadoras que han trabajado en este campo, destacaremos aquí a: Terry Orlick (Canadá) en cuanto que sus trabajos con paracaídas, recopilaciones de juegos esquimales... son punto de referencia de muchos autores  y Carlos Velázquez y Mª Inmaculada Fernández (La Peonza. Valladolid) en cuanto que son más cercanos a nosotros y sus trabajos los podemos conocer por su revista y las actividades que han realizado en nuestra provincia..
Las conclusiones a las que se llegan a través de estas investigaciones son:
·        Es muy positiva esta metodología pero sólo si se tiene oportunidad de practicarla con compañeros distintos (no siempre con el mismo grupo).
·        Tener claro que introducir actividades cooperativas en clase, no aumenta necesariamente la cooperación si no va unido a un cambio en la metodología y en los objetivos (cómo y para qué).
“En definitiva, los diferentes estudios e investigaciones que hemos presentado, desarrollados en diversos países y contextos, parecen poner de manifiesto la superioridad de las metodologías cooperativas sobre las basadas en la competición o en el trabajo individual para favorecer una Educación Física de calidad, que permita que todos y cada uno de nuestros alumnos y alumnas, con independencia de sus características personales, desarrollen al máximo sus habilidades y destrezas motrices, su condición física, sus habilidades expresivas, etc., y todo ello en un marco inclusivo centrado en las relaciones interpersonales y en la comunicación grupal que, a buen seguro, crea un clima positivo de clase, facilita los procesos de socialización y permite una transferencia de las situaciones de aula a otros contextos de la vida”.
Todas las evidencias sugieren que el aprendizaje cooperativo es una estrategia de enseñanza innovadora que puede contribuir muy positivamente a los programas educativos
¡Utilicémoslo!.


3.-ALGUNAS SUGERENCIAS:

3.1.-APRENDIZAJE COOPERATIVO COMO METODOLOGÍA:
No basta con organizar los grupos y decirles que se ayuden, hay que organizar estrategias para hacer esto inevitable.
  • Evitar:
    • Efecto polizón (los menos capaces dejan que lo hagan los demás).
    • Roles de liderazgo (los más capaces hacen lo más importante, los otros pasan a limpio...).
    • Dispersión de la responsabilidad y haraganería social.
    • Abandono del trabajo ante el mínimo problema (con la tarea o con los compañeros).
  • Conseguir (componentes del aprendizaje cooperativo):
    • Interdependencia positiva (mi trabajo beneficia a los demás y viceversa).
    • Interacción promotora (cada miembro anima a los demás).
    • Responsabilidad interpersonal e individual.
    • Habilidades interpersonales y de grupo (técnica de grupo...)
    • Procesamiento grupal o autoevaluación (reflexionar sobre su trabajo).
  • Premisas para utilizar esta metodología cooperativa con garantía de éxito:
    • Todos los participantes deben tener contacto casi constante con el instrumento de juego, maximizando el tiempo de práctica.
    • Plantear las actividades de forma que tengan máximas posibilidades de éxito, pero que a la vez supongan un reto a superar.
    • Organizarlas siempre en grupo.
    • Modificar las normas de las actividades de forma que exista un máximo tiempo real de actividad (de juego, de participación...).
    • Todo el alumnado debe practicar todas las posiciones y posibilidades de los juegos para que tengan una visión global.
    • Cada participante debe cambiar de equipo o grupo para evitar que surjan profundas rivalidades.
    • No es imprescindible empezar por situaciones de juego real. Mejor seguir una progresión ascendente.
·        Para lograrlo, presentamos aquí unos ejemplos de estructuras cooperativas:
    • Puzzle (Aronson, 1978)
    • Enseñanza recíproca (Mosston 1978)
    • Marcador colectivo (Orlick 1990)
    • Juego cooperativo (Grineski 1996)
    • Piensa, comparte, actúa (Grineski 1996)
    • Yo hago-Nosotros hacemos (Velázquez 2003)
    • Descubrimiento compartido (Velázquez 2003)

3.2.-PROBLEMAS:
Se dedica poco tiempo a programar actividades cooperativas.
Estamos inmersos en un sistema que apoya modelos de conductas opuestas (televisión, deportes profesionales, actividades deportivas extraescolares...)y a veces es duro nadar contra corriente, pero ir a favor lleva inevitablemente al desastre.
Es preciso potenciar la creatividad personal (logrando un equilibrio entre conformismo e individualidad) y la armonía dentro de las relaciones.
No todas las áreas se prestan al intercambio y al trabajo en grupo, es necesario una cuidadosa planificación.
Las clases de E.F. son el único lugar en el que todo el alumnado, independientemente de su nivel de destrezas físicas, de su género o de su condición social, tiene posibilidades de iniciarse en los diferentes tipos de deportes.

4.-BIBLIOGRAFÍA:
Este documento se ha obtenido de los artículos:
o       EL APRENDIZAJE COOPERATIVO EN E.F. (Ponencia de Carlos Velázquez en el III Congreso Estatal y I Iberoamericano de Actividades Física Cooperativas celebrado en Gijón –Asturias- en Julio de 2003).
o       LA ENSEÑANZA DEL DEPORTE DESDE UNA METODOLOGÍA COOPERATIVA (Artículo de Carmen González y Javier Fernández-Río aparecido en la Revista de E.F. “Tándem” nº 10).
En ambos artículos se aporta un rica bibliografía sobre trabajo cooperativo en educación.

CONCLUSIONES PERSONALES:
            No basta con trabajar en grupo para lograr la cooperación, es necesario forzar la colaboración buscando siempre la mejora del propio aprendizaje y el de los demás.
            Para ello hay que planificar cuidadosamente las actividades (acompañándolas de un cambio en los objetivos y en la metodología) y elaborar estrategias que hagan necesaria la cooperación.
            Un ejemplo en el que la cooperación se hace necesaria es cuando cada persona o grupo recibe una información incompleta acerca de una danza. Para poder bailarla correctamente deberá cada persona, inevitablemente,  enseñar su parte a otras personas y aprender lo que le pueden enseñar ellas (estructura PUZZLE).


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me ha gustado, parece bastante realista. Me gustaría llevarlo a la practica en mi trabajo ¿Puede tener éxito llevar a cabo algunas acciones y otras no?

Unknown dijo...

Siento no haberte respondido antes. Le diría que se trata de seguir unas condiciones, o normas determinadas que han demostrado tener efectividad en el aprendizaje, si no se cumplen los requisitos entiendo que el resultado no será ni tan efectivo ni tan consistente. Es igual que cuando pretendemos iniciar un programa de modificación de conducta, no podemos dejar de hacer lo pactado durante un cierto tiempo para tener efectividad. No obstante, le animo a que lo experimente por sí mismo. Gracias por visitar mi blog.